El Sexto Sentido

Aunque era su tercer largometraje, El Sexto Sentido fue la película que abrió las puertas del éxito al cineasta de origen indio, pero afincado en Estados Unidos, M. Night Shyamalan. Sus siguientes películas, El Protegido, Señales y El Bosque han consolidado su fama y prestigio como director de culto.

Emparentada por temática con la más moderna Los Otros de Alejandro Amenábar, El Sexto Sentido combina terror sobrenatural con intriga, en una atmósfera única e inquietante y con un final sorprendente.

Bruce Willis es el psiquiatra infantil Malcolm Crowe, que trata de ayudar al niño Cole Sear (impresionante papel de Haley Joel Osment). Olivia Williams es Anna, la esposa de Malcolm y Toni Collette hace el papel de Lynn Sear, la madre del niño.

Analizamos aquí la edición de un disco de esta película, distribuida en España por Hollywood Pictures / Buena Vista.

Tak Fujimoto dirigió la fotografía del film, contribuyendo a crear su atmósfera de misterio con un magnífico uso del color y de la iluminación. Lamentablemente, una mediocre transferencia a DVD afectará negativamente a la sensación visual de ver esta película en nuestra casa.

Presentada por lo menos en su formato original de cine, de aproximadamente 1.85:1 y con mejora anamórfica, resulta sorprendente constatar que el máster incluye algunos (aunque pocos) defectos de celuloide, en forma de pequeñas manchitas blancas bastante esporádicas.

Por lo demás, tenemos toda una retahíla de defectos y críticas que hacer a la imagen: Desde una horrorosa falsa coloración - afortunadamente, se nota principalmente en los títulos de crédito en los que las letras no se ven blancas sino que presentan tonalidades de color - a abundante grano que provoca mucho ruido bajo nivel en todos los fondos e incluso una cierta posterización - saltos bruscos de color en zonas con tonalidades parecidas. Las caras de los personajes aparecen con poco detalle y sin perfilar correctamente.

Es esta una imagen muy suave, con negros no demasiado oscuros y con un contraste regular. Pero pese a este poco contraste, las escenas oscuras pierden casi todo el detalle. Para rematarlo, hay un molesto realce de contornos, visible en las zonas más contrastadas de muchas escenas.

Codificada con unos bastante buenos 6.0 Mbps de tasa de bits media para la imagen, por lo menos los defectos de compresión se limitan al grano y al ruido de fondo.

El cambio de capa es correcto, está en un cambio de escena donde no interrumpe tampoco el audio.

Aunque vista en televisores de tamaño pequeño o medio la imagen no parece demasiado mala, lo cierto es que evidenciará todas sus limitaciones en dispositivos de visualización más exigentes como proyectores o durante la reproducción en PC. En cualquier caso, está muy por debajo de lo que habría que exigir a una película de finales del siglo XX.

Aunque muy poco espectacular, no tenemos ningún reproche que hacer al audio de la versión original en inglés, presentado en Dolby Digital 5.1 a 384 kbps.

Como se ve en este gráfico, es un sonido fundamentalmente frontal. El subwoofer permanece inédito prácticamente todo el rato y los altavoces surround resaltan ligeramente la música y algún efecto puntual, pero con poco protagonismo.

El arco frontal se reparte la música - magnífica composición de James Newton Howard y los efectos sonoros (disparos...). Además, algunas de las voces de Cole suenan por todo el trío frontal, para darles más énfasis (por ejemplo, en 1h 33' 50'').

Todos los diálogos usan el canal central. Pese a que su volumen es bastante bajo, no hay problemas en seguirlos, ya que el resto de elementos sonoros también están a volumen bajo.

La fidelidad de la música es muy buena, aunque algunos efectos sonoros como los disparos de la secuencia inicial quedan algo pobres.