Ben-Hur (1925)

En el tercer disco se encuentra la versión restaurada y con acompañamiento musical de Ben-Hur (Ben-Hur: A Tale of the Christ, 1925), el largometraje mudo dirigido por Fred Niblo que supuso una de las cumbres del cine de su época.

Protagonizada por Ramon Novarro (Ben-Hur), Francis X. Bushman (Messala) y May McAvoy (Esther), los retos de esta producción se acercaron bastante -y en algunos casos superaron- a los del remake de varias décadas después. Así, la escena de la batalla naval resulta probablemente más realista en este primer film y la carrera de cuádrigas no desmerece en absoluto.

Otra peculiaridad de esta versión es que, rodada y estrenada antes de la implantación del Código Hays de moral en las películas, incluye un desfile con mujeres en top-less, como puede apreciarse en la penúltima de las capturas de esta página.

En esta segunda parte del análisis, la información de la barra lateral (duración, capítulos, cambio de capa, audios, etc.) corresponde a los datos del tercer disco -la película Ben-Hur de 1925-.

El Ben-Hur de 1925 se presenta en una restauración británica del año 1988. La película se rodó mayoritariamente en blanco y negro, aunque este monocromatismo se transformó en partes tintadas en sepia, otras en azul y otras en gris en las diferentes secuencias del metraje. Además, algunas (pocas) escenas se rodaron en el primitivo Technicolor bicolor, con una limitada policromía.

La imagen está relativamente limpia en el DVD, aunque ocasionalmente pueden encontrarse defectos de celuloide en forma de manchas y rayas. La definición es muy limitada. Se nota que la película ha sido limpiada durante la restauración, pero este proceso la ha suavizado en demasía y le ha robado mucho detalle. Mucho más grave es el hecho de que el DVD se ha transferido desde un vídeo entrelazado, lo que crea continuos defectos de doble imagen (ghosting) y le quita aún más definición; en dispositivos de visualización progresivos, la situación resulta aún peor.

El contraste y la luminosidad son aceptables, por lo menos en los fragmentos en blanco y negro (que son la mayoría). En cambio, las primitivas escenas en color aparecen tan oscuras que resulta difícil discernir lo que aparece en las mismas.

La compresión es intachable, con una tasa de bits para la imagen de 4.4 Mbps -la suavidad y falta de detalles no piden mucho más-. El cambio de capa está ubicado en un fundido a negro, por lo que resulta también impecable.

Para el Ben-Hur de 1925 se han compuesto varias bandas sonoras de acompañamiento. No se incluye la original de 1925, de William Axt y David Mendoza, sino una pista estereofónica con la partitura compuesta por Carl Davis en 1987, interpretada por la Orquesta Filarmónica de Londres.

Puesto que esta es una película muda, esta banda sonora se limita a cumplir correctamente con su función de acompañamiento, sin ningún defecto a reseñar.